Para poder iniciar el tratamiento, empaparemos las vendas en agua fría, las escurriremos y volveremos a empaparlas esta vez en líquido de vendas frías (siempre en la proporción que nos indique el fabricante). A continuación colocaremos las vendas y las dejaremos actuar durante unos 30 minutos. El tratamiento de vendas frías realizado con TUBIFORM nos garantiza una reafirmación uniforme y el buen riego sanguíneo, ya que TUBIFORM ejerce un masaje de drenaje y nos ayuda a facilitar la circulación de retorno que pretendemos estimular. Su acción sobre los vasos sanguíneos resulta de gran importancia para proporcionar un estímulo circulatorio con la consecuente reducción de edemas.

El primer paso a seguir para una mejor absorción de los productos, (líquido o gel reductor) es la activación del riego sanguíneo mediante un masaje corto y enérgico, reforzándolo en las zonas con mayor concentración de celulitis. Empapamos las vendas TUBIFORM a utilizar, en agua caliente, las escurrimos y las volvemos a empapar en el líquido reductor (siempre en la cantidad que indique el fabricante del producto). Deben estar muy calientes y húmedas, pero no goteando. Puesto el vendaje tubular, se cubre todo con film oclusivo (papel osmótico), para evitar la evaporación del producto. Finalmente usaremos una manta eléctrica durante 30 o 40 minutos con el termostato a temperatura media. Una vez transcurrido el tiempo de aplicación pasaremos a dar un masaje con crema reductora.